No es malo admitir que la mayor parte de dibujos animados que habitan en el recuerdo de los chicos de la treintena eran bastante mucho más groseros de lo que la melancolia desea aceptar. Las series de Hanna-Barbera emitidas a lo largo de los ochenta eran de todos modos artículos fabricados de manera económica a lo largo de los sesenta. Las chustes nacionales producidas por D’Ocon (Los Fruitis, Delfy y sus amigos o Basket Fever) fueron enemas catódicos insoportables. Y los más destacados dibujos animados de la temporada repetían esquemas y guiones sin atreverse a crear pues no habían sido elaborados por gente que hubiese crecido observando dibujos animados, sino más bien por currantes desapasionados.
Hasta el momento en que los estudios se desperzaron, la cosa se puso seriamente y a lo largo de los noventa y los primeros 2-smiles se gestaron cosas tan fantásticas como El laboratorio de Dexter, Vaca y Pollo, Agallas el perro cobarde , Ren y Stimpy, Animaniacs, Las Supernenas, Samurai Jack, Las macabras aventuras de Bill y Mandy, Invasor Zim, Avatar o Flapjack. Los dibujos para los mucho más pequeños dejaron de tratar a los pequeños con condescendencia y capturaron a los mayores en el desarrollo. Y una vez que Los Simpson les allanaran el sendero, otros optaron por centrarse en el público mucho más maduro. O a vestirse con groserías para realizar unas risas, como ocurría con South Park y Padre de familia. Hoy en día hay series animadas que son genuinas joyas, producciones increibles capaces de ponerse entre lo destacado que proporciona la televisión actualizada sin que absolutamente nadie logre decirles nada.
Henry Danger
Quizás ciertos hallará la decisión de añadir Henry Danger con las mejores series como Star vs. las fuerzas del mal algo aberrante, pero pensamos que está completamente razonado.
Stranger Things, temporada 4
Otra sorpresa. Tras la mediocre temporada 3 y un largo periodo de espera, no creímos que Stranger Things pudiese recobrar la magia de la primera temporada, pero la parte 4 fue una aventura épica. Pese a estar dividida en 4 narrativas diferentes, logró sostener nuestra atención de principio a fin, enseñar instantes memorables y nuevos individuos que se triunfaron nuestro corazón.
DISNEY XD
Accediendo ahora en lo privado, este es el resultado de la destrucción de Jetix. Da la impresión de ser un pequeño campo de pruebas para la pública. Con una imagen mucho más audaz, experimenta con múltiples franquicias que se muestran y desaparecen de forma continua. ¿Algo que resaltar? Gravity Falls, indudablemente.
Esta cadena semeja que se quedó bloqueada en el 2007. Si Disney aprendió por las malas que los pequeños de el día de hoy no desean sitcoms, este desea meterse con embudo. Es imposible vivir eternamente de Bob Esponja, hay que reinventarse, y a pesar de que los Rabbids estén simpáticos, no es bastante.